A mediados de septiembre comienza la época del celo del ciervo rojo (Cervus elaphus) que se extiende hasta pricipios del mes de octubre. Normalmente coincide con las primeras lluvias y el fresco que anuncia el final del verano. Se llama berrea por el sonido gutural que emiten estos animales que les sirve para intimidar a sus adversarios, a la vez que el tamaño de la cornamenta y otras artes como puede ser el color negruzco que adquiere su barriga debido a la mancha de su propio orín ya que el olor es otro factor intimidatorio, también arrastran sus cornamenteas por sus zonas de campeo para que por unas glándulas situadas en los mismos desprendan también olor y así ahuyentar a sus compañeros. De no triunfar los citados aspectos, veremos una auténtica lucha de los machos , golpeando sus cornamentas e intentado desplazar al contrincante de su territorio.
Un auténtico espectáculo.
Un auténtico espectáculo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario